La Fight Night nació porque sabemos que el mejor modo de conocer a alguien y disfrutar un buen momento con él/ella es si se comparte un reto, si lo miramos a los ojos, si lo que se hace es divertido, se crea un vínculo que es difícil de romper.

Somos animales, jugando aprendemos a conocernos y retándonos aprendemos respeto, un respeto sano: el que tiene el vencedor por el vencido y el vencido por el vencedor. Esta sensación, el conocer que las reglas de una competición nos ponen a todos en el mismo plano y obligan a todos a tocar el suelo en un burpee o a no golpear debajo del cinturón, las reglas y las pasiones, hacen que durante el match, durante el juego, seamos todos iguales.

Por eso creamos el challenge corner, para que todos pudieran entrar en el espíritu de la noche, y para hacer que fuese un evento activo y participativo. El juego, la competición y las reglas anulan las diferencias y nos volvemos libres haciendo que, tácitamente, entren al interior de una comunidad que por definición es un conjunto de individuos que comparten el mismo ambiente físico y tecnológico, formando un grupo reconocible, unido por vínculos organizativos, lingüísticos, religiosos, económicos y de intereses comunes.

Esto queríamos durante la noche del sábado: iguales y reconocibles, vestidos de negro, dentro de nuestro club, compartiendo este espacio con personas de otros Boxes, unidos por las mismas pasiones y reglas que son propias de cualquier reto y juego. Por esto tenemos que aceptar las reglas de la comunidad en la que vivimos, que es también la ciudad que tanto amamos.

La próxima vez será todavía mejor, no lo dudéis, preparaos para oír hablar de nuevo de la Fight Night. Pronto.

Michele
Labor Omnia Vincit creator